“Pedimos al gobierno que tengamos una pausa tributaria similar a la aprobada en el tema financiero, con los plazos que se ha dado en la banca hasta fin de año”, señaló Rolando Kempff, presidente de la Cámara Nacional de Comercio.

Se estima que dicha pausa significaría una bocanada de aires fresco a las empresas afectadas por la paralización de actividades, interrupción de las cadenas de suministro y disminución de los niveles de consumo.

Explicó que la economía vive la mayor recesión de la historia reciente con menor actividad económica, incremento del desempleo y el aumento de la informalidad. “Estamos en una situación complicada”, remarcó el titular del gremio empresarial del comercio.

Aclaró que la solicitud no implica una condonación de tributos sino un diferimiento de su pago. “No estamos pidiendo que se eliminen (los impuestos). Entendemos que el gobierno también tiene que vivir”, dijo en contacto con la prensa.

Citando diferentes estudios, la Cámara Nacional de Comercio considera que la economía boliviana registrará este año una contracción de entre 7% y 8% a causa de la pandemia del coronavirus, lo que significa un reducción de alrededor de 4.000 millones de dólares.

Organismos nacionales e internacionales han dado cuenta de un aumento del desempleo a causa de despidos y cierres de empresas. Esto repercute en un incremento del sector informal cuyo volumen es elevado en el país (entre 70% y 80%).

El sector privado estima que la recuperación económica puede generarse a través del sector agropecuario, así como mediante la economía naranja y la tecnología. También se ha planteado que para dinamizar el aparato productivo nacional, el gobierno disponga que un 20% de los ingresos que perciben los asalariados sea canalizado a la adquisición de bienes y servicios de origen boliviano.

La Cámara de Comercio manifestó su preocupación pues el país se verá afectado por tres frentes: el político, el sanitario (por la pandemia) y el económico.

Pausa tributaria

La Cámara Nacional de Comercio planteó la aprobación de una pausa tributaria para que las empresas productivas puedan recuperarse tras la pandemia que ha paralizado la economía, provocado el cierre de empresas y generado desempleo.