Moderna, que asegura una eficacia del 94,5% en la fase 3 de la vacuna, dijo que su producción se usará enteramente en los Estados Unidos, pues el gobierno de ese país invirtió casi mil millones de dólares en su desarrollo.

La distribución de la vacuna comenzará una vez que el órgano regulador les otorgue la aprobación de emergencia y para ello, la solicitud formal será presentada en el transcurso de las próximas semanas.

Una de las ventajas de esta nueva vacuna es que, a diferencia de otras no es necesario mantener las ampollas a temperaturas extremadamente frías para preservarlas empollas. La vacuna de Moderna puede ser almacenada y transportada a -20ºC, mientras que la de Pfizer requiere de -70°C.

Los inversionistas estadounidenses y europeos recibieron complacidos la noticia. La bolsa de Nueva York registró alzas y las acciones de Moderna treparon en más del 16%.

También subieron las acciones de las empresas que pudieran verse favorecidos con la reapertura de la economía: United Airlines Holdings y el operador de cruceros Royal Caribbean. En contraste, bajaron las acciones de Zoom Video Communications.

Las bolsas europeas de Milán, Londres, París, Madrid y Fránkfort también cerraron al alza. Los principales mercados bursátiles del Asia (Tokio, Shanghái y Hong Kong) también reaccionaron con entusiasmo.

La algarabía también repercutió en un alza de la cotización del euro, el incremento del precio del barril de petróleo y un repunte en la cotización del oro.

La esperada vacuna

El anuncio de la farmacéutica Moderna de que hasta fin de año podrá producir hasta 20 millones de vacunas disparó los mercados mundiales ante lo que anticipa el fin de las restricciones y el retorno a la normalidad que tenía el mundo antes de la pandemia.