Solo así recuperará la senda de crecimiento empañada por la pandemia del coronavirus.Tal fue la recomendación de Pablo Sanguinetti, ejecutivo de la Corporación Andina de Fomento, (CAF) durante el XIII Encuentro de Economistas, organizado por el Banco Central de Bolivia, que abordó el tema de las “Políticas económicas en la cuarentena y los desafíos de los países de la región frente a la pandemia”.

“Si no actuamos en forma correcta el crecimiento potencial va a debilitarse. Eso afectará el crecimiento per cápita”, dijo el economista, trasseñalar que por el impacto de la pandemia, la región Latinoamérica corre riesgo de enfrentar otra década perdida, pues en las actuales circunstancias, recién recuperaría en 2025 el ingreso per cápita obtenido en 2015.En cuanto a la estabilidad macroeconómica, Sanguinetti dijo que es preciso recuperar el espacio fiscal mejorando el componente de ingresos, fortaleciendo sobre todo las recaudaciones fiscales que no están relacionadas con los hidrocarburos como los impuestos a los ingresos.Por el lado del gasto, recomendó focalizar el gasto social evitando filtraciones que beneficien a los sectores que no precisan transferencias.

Asimismo, mejorar la eficiencia del gasto público reduciendo los gastos corrientes no prioritarios.También será importante aumentar la calidad de la inversión pública, subrayando que uno de los determinantes para la recuperación económica es el incremento del gasto en infraestructura, que aumenta la demanda agregada y la productividad.La economía boliviana registró una desaceleración a partir del año 2016 tras la caída de los precios de las materias primas. Para recuperar su crecimiento potencial es preciso diseñar una agenda de productividad que no esté sustentada únicamente en la inversión y en la mejora del capital humano, anotó el economista.

Dicha agenda exige mejorar la competencia reduciendo impuestos y costos a la apertura de empresas y trabajar por abrir más mercados. Incluye reformas en la legislación laboral. Supone mejorar la infraestructura física y logística y ampliar la digitalización y el acceso a internet. Demanda asegurar el acceso a los recursos financieros pero no por la vía de establecer techos y pisos de tasas de interés ni definiendo cupos de crédito para los sectores, pues, en su criterio, esa no es “la mejor forma de asignación de recursos”.

Para profundizar los avances sociales es preciso mejorar el capital humano, ampliar el acceso a los servicios básicos y fortalecer los sistemas de protección social.Sanguinetti sugirió fortalecer las capacidades institucionales del Estado con el reclutamiento de personal burocrático seleccionado con criterios meritocráticos. Esto permitirá mejorar la planificación, la selección de proyectos, la adjudicaciónde contratos y la fiscalización.

Hay que impulsar una mejor asignación de ingresos y gastos en los gobiernos regionales con incentivos para mejorar las recaudaciones tributarias. Es recomendable digitalizar los servicios públicos permitiendo un acceso transparente a la información pública.

AGENDA ECONÓMICA POST PANDEMIA

Bolivia requiere una agenda de mediano plazo que ponga énfasis en la estabilidad macroeconómica, que apuntale la productividad, que profundice los avances sociales y que fortaleza el desarrollo institucional.