Inclusión Financiera de las Mujeres en Bolivia

El Fondo de Garantía sería equivalente a instrumentos similares creados para el sector productivo y para la vivienda de interés social con el 6% de las utilidades netas de las entidades bancarias al cierre de gestión, en cumplimiento a las disposiciones de la función social de los servicios financieros establecidos en la Ley del sector.

El Fideicomiso podría considerar opciones de financiamiento como la emisión internacional de un “Bono social de Género” para captar el apoyo a iniciativas de las mujeres empresarias y emprendedoras y a su autonomía económica. Asimismo, podría gestionarse apoyo financiero internacional en términos concesionales para proyectos asociados a objetivos de lucha contra la pobreza, mitigación del cambio climático, desarrollo sostenible y reactivación económica.

Los cambios normativos están orientados a contar con una regulación financiera incluyente y no discriminadora a fin de promover mayor acceso a servicios financieros y disminuir la brecha de género con miras a alcanzar mayores niveles de equidad.

Las propuestas están contenidas en el libro “Inclusión financiera de las mujeres. Hacia la Igualdad de Género en Servicios Financieros: Diagnóstico y Propuesta”. El documento fue publicado con el apoyo financiero de la Embajada de Suecia en Bolivia y COSUDE, el concurso de ONU Mujeres y la Embajada de Canadá en Bolivia y los aportes del Comité de Emprendedoras y Empresarias de Bolivia (CEEB). La obra fue coordinada por Reynaldo Marconi

y participaron en su elaboración varios integrantes del Instituto de Estudios Avanzados en Desarrollo (Inesad).

Según el estudio “Brechas de género en la inclusión financiera” del grupo Credicorp la brecha de género en inclusión financiera en América Latina persiste, pese a ciertos avances registrados. Mientras que un 26% de hombres se encuentran en el nivel alcanzado de inclusión financiera, solo un 21% de mujeres logran ubicarse en el mismo nivel.

En Bolivia sólo un 12% de las mujeres bolivianas alcanzó un nivel óptimo de inclusión financiera, frente al 17% de hombres. Esos datos ubican al país en el último puesto del ranking.

El país tiene uno de los porcentajes más bajos de inclusión financiera en la región. En los 8 países de América Latina que incluye el estudio, la proporción de mujeres incluidas adecuadamente al sistema financiero alcanza al 21%, mientras que en el caso de los varones es de 26%, lo que muestra una brecha de 5 porcentuales.

En el ámbito regional, las proporciones de mujeres con nivel alcanzado de inclusión financiera son las siguientes: Argentina (38%), Panamá (33%) y Chile (31%), Ecuador (27%), Perú (18%), México (17%) y Colombia (16%).

Las mujeres en Bolivia reportan un mayor número de barreras para acceder a productos financieros en comparación con los hombres, lo que refleja la existencia de desafíos adicionales para lograr la inclusión financiera equitativa.

Un factor alentador es que las mujeres bolivianas son las que más emplean la billetera móvil con relación a los varones.