Sin embargo, los avances no son todavía suficientes, por lo que queda todavía camino para superar las múltiples inequidades que aún persisten, las de ocupación y de salarios, entre otras.

Una de las tareas pendientes es la consolidar la presencia femenina en los niveles de decisión.

Si bien es cierto que la mujer ha logrado incursionar en las actividades que eran consideradas exclusivamente masculinas (banca, minería, hidrocarburos, construcción) no se ha avanzado de la misma manera en cuanto a su protagonismo en los segmentos de liderazgo, aquellos donde se toma decisiones.

Cada vez las mujeres ocupan más puestos de responsabilidad, pero a menudo se les dificulta llegar al último escalón. Pese a la creciente presencia de mujeres en los consejos de administración, el mundo de la empresa sigue estando ampliamente dirigido por varones. Con frecuencia, la mayor presencia de mujeres en los comités ejecutivos se enfoca a funciones relacionadas con recursos humanos y marketing.

Un informe de la consultora Deloitte (2021), elaborado en base a cerca de 10.500 empresas de todo el mundo, indica que sólo el 19,7% de los miembros de consejos de administración eran mujeres. Entre los CEOS, la proporción de mujeres se reducía al 5%. En América Latina la presencia de mujeres en los consejos de administración alcanza al 10,4% y a 1,6% entre los CEOS, según una muestra que incluye a 320 empresas en Brasil, México, Argentina, Colombia, Chile y Perú.

En Bolivia, según un estudio realizado por Fundación Iguales (2023), la participación de mujeres en posiciones de liderazgo en empresas y Cámaras empresariales de La Paz, Cochabamba y Santa Cruz es todavía débil.

Solo una de cada 10 empresas grandes está liderada por mujeres. El 6% de las presidencias de directorios de empresas están ocupadas por una mujer. Uno de cada 8 directores de medianas empresas es mujer. Apenas el 16% de los puestos directivos en las Cámaras Nacionales, Departamentales y Locales están ocupados por mujeres.

Persisten las brechas de género en materia de ocupación y de salarios. Según datos del INE, la tasa de ocupación laboral de las mujeres al cuarto trimestre de 2023 fue de 65,4%, mientras que la de los varones llegó a 77,2%, mostrando una diferencia de casi 12 puntos porcentuales.

Entre las mujeres prevalece el empleo precario y temporal y sin goce de beneficios laborales como el pago de vacaciones o la afiliación a la seguridad social de corto y largo plazo ONU Mujeres ha mostrado que el salario de las mujeres es un 26,5% inferior al de los varones que desempeñan ese mismo trabajo.

Datos de International Finance Corporation (IFC), entidad perteneciente al Grupo del Banco Mundial, establecen que en Bolivia, el 46% de los emprendimientos son liderados por mujeres. Por tal razón, varias entidades financieras han dirigido esfuerzos para proporcionar soluciones integrales a los negocios liderados por mujeres.

Han surgido también gremios para estimular la gestión empresarial de las mujeres y fortalecer redes de negocios colaborativas e inclusivas que les permitan expandir sus negocios de manera sostenible.

El Sistema de las Naciones Unidas en Bolivia hizo un reciente llamado para asegurar la inversión pública y privada en políticas y programas destinados a constituir igualdad, pues al actual ritmo, se necesitarán más de 300 años para alcanzar la plena igualdad de las mujeres.

El gran reto: la mujer en puestos de decisión

La mujer tiene una presencia cada vez más gravitante en distintos ámbitos de la economía, lo que, indudablemente, es un motivo de satisfacción en el proceso de construcción de una sociedad más igualitaria.