AGENDA ECONÓMICA PARA BOLIVIA
Agenda Economica Bolivia

AGENDA ECONÓMICA PARA BOLIVIA

17/08/2020

Bolivia requiere una agenda de mediano plazo que ponga énfasis en la estabilidad macroeconómica, que apuntale la productividad, que profundice los avances sociales y que fortaleza el desarrollo institucional. Solo así recuperará la senda de crecimiento empañada por la pandemia del coronavirus.

Tal fue la recomendación de Pablo Sanguinetti, ejecutivo de la Corporación Andina de Fomento, (CAF) durante el XIII Encuentro de Economistas, organizado por el Banco Central de Bolivia, que abordó el tema de las “Políticas económicas en la cuarentena y los desafíos de los países de la región frente a la pandemia”.


“Si no actuamos en forma correcta el crecimiento potencial va a debilitarse. Eso afectará el crecimiento per cápita”, dijo el economista, tras señalar que por el impacto de la pandemia, la región Latinoamérica corre riesgo de enfrentar otra década perdida, pues en las actuales circunstancias, recién recuperaría en 2025 el ingreso per cápita obtenido en 2015.


En cuanto a la estabilidad macroeconómica, Sanguinetti dijo que es preciso recuperar el espacio fiscal mejorando el componente de ingresos, fortaleciendo –entre otras cosas- las recaudaciones fiscales que no están relacionadas con los hidrocarburos como por ejemplo los impuestos a los ingresos.


Aclaró que son reformas fiscales “de mediano plazo” y no inmediatas, pero que se requieren para mantener los programas sociales que tiene el país.


Por el componente del gasto, recomendó focalizar el gasto social y mejorar la calidad de la inversión pública, subrayando que uno de los determinantes para la recuperación económica es el incremento del gasto en infraestructura, que aumentos en la demanda agregada y de productividad en el mediano y largo plazo.


Recordó que la economía boliviana registró sufrió una desaceleración a partir del año 2016 tras la caída de los precios de las materias primas. Para recuperar el crecimiento potencial de la economía es preciso diseñar una agenda de productividad que no esté sustentada únicamente en la inversión y en la mejora del capital humano, anotó el economista.


Tal agenda tiene cuatro componentes. Mejorar la competencia reduciendo impuestos y costos a la apertura de empresas, y trabajar por una mayor apertura comercial firmando nuevos acuerdos internacionales Incluye también reformas en la legislación laboral. Supone mejorar la infraestructura física y logística y ampliar la digitalización y el acceso a internet. Finalmente, asegurar el acceso a los recursos financieros pero no por la vía de establecer techos y pisos de tasas de interés ni definiendo cupos de crédito para los sectores, pues en su criterio no es “la mejor forma de asignación de recursos”.


Se profundizan los avances sociales mejorando el capital humano, ampliando el acceso a los servicios básicos, fortaleciendo los sistemas de protección social como la salud, al que el 43% de los trabajadores asalariados no tiene acceso.


Sanguinetti sugirió además fortalecer las capacidades institucionales del Estado con el reclutamiento de personal burocrático seleccionado con criterios meritocráticos. Esto permitirá mejore la planificación, la selección de proyectos, la adjudicación de contratos, y la fiscalización. Hay que impulsar una mejor asignación de ingresos y gastos en los gobiernos regionales con incentivos para mejorar las recaudaciones tributarias. Finalmente, es recomendable digitalizar los servicios públicos permitiendo un acceso transparente a la información pública.

Nota editorial: Por Grupo Nueva Economía · Última actualización 17/08/2020